Carta de un Notario Público de Acapulco

miércoles, 19 de noviembre de 2008

ACMPP

Hemos recibido una carta que nos escribió un Notario Público de Acapulco, Gro.

La reproducimos aquí porque es elocuente. En pocas palabras resume todo cuanto hemos venido diciendo acerca de la necesidad de monetizar la onza "Libertad" de plata: sirve para proteger a la familia mexicana de los vaivenes de la economía, ya sea por políticas económicas erradas o por los fracasos recurrentes de nuestras instituciones bancarias. Que las familias mexicanas - que tienen una existencia real, de carne y hueso, y que no son meras "personas morales" como las compañías - puedan sobrevivir en tiempos difíciles. Ese es el objetivo de convertir la onza de plata ‘Libertad' en dinero.

Hugo Salinas Price

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Sr. Hugo Salinas Price

Presente

Acuso recibo de su último libro intitulado “Cómo convertir la moneda de plata en dinero”.

Yo conocía solamente el primero de 1998. Buscaré con interés los restantes.

Mi familia es de origen Taxqueña, mi bisabuelo Gabriel fue carpintero e inventor y construyó molinos de metal con madera, siguiendo la elaboración con el calendario de Galván al cortar, pulir, dejar secar y ensamblar la madera en diferentes estadios de la luna.

Estas maquinas tuvieron tanto éxito contra las Alemanas, Holandesas y Americanas, que al pagarle en oro la abundancia del dinero y su afición a celebrar lo llevaron a la cirrosis y a la muerte.

La bisabuela Natalia, guardaba algunas monedas de oro y muchas de plata 0.720, en latas alcoholeras que enterraban debajo del tecorral en la vieja casa del Barrio de Pilita desde antes de la revolución.

La previsión de esta moneda saco a la viuda y sus 5 hijas de la miseria, ya que con este capital y su trabajo se dedicaron a la matanza de reses y la tablajería.

El Peso Plata, salvó de la quiebra a la familia.

Mi abuelo fue minero y zapatero y mi padre minero, mecánico, diseñador de joyas y orfebre, y yo mismo vendedor de plata de los 12 a los 22 años.

Otra vez la bondad del metal nos permitió sobrevivir y a mi seguir una preparación universitaria.

[…]

Aprovecho la oportunidad para agradecerle el esplendido envío y me reitero como siempre su Atento Amigo.