Este articulo lo estoy escribiendo despacito, porque se que algunas gentes no saben leer muy aprisa.
Voy a hablarles de tres cosas; de la insistente proposición de dolarizar la economía, del síndrome de notoriedad repentina y la tendencia a dar opiniones irresponsables.
Se solía decir, cuando yo era joven, que de médico, poeta y loco, todos tenemos un poco. Un dicho popular, como hay tantos.
Se quería hacer resaltar la propensión a recetar sin saber de medicina, a hacer versos sin saber hacerlos ( lo cual sería inofensivo si no fuera porque se los recitan a cuanto inocente se deja) y de la frecuente manifestación de locura en la conducta humana. Esta ultima parte es la menos mala.
En cuanto alguien en una conversación manifiesta tener alguna dolencia, el médico integrado que llevamos dentro se exalta y receta. "tómese un té de boldo en ayunas.." "Póngase unas inyecciones de "AntiGripona", de las de caja azul. No vaya a confundir con las de caja verde..." " Tome cucharadas de "Aquetóse" y rece tres padres nuestros." "Que le hagan un té de carrizo..."
El viejo dicho es válido, sólo que algunas gentes no saben abstenerse de abrir la boca y otros si. Actualizado, el dicho debería decir "De médico, poeta, economista y loco, todos tenemos un poco".
Porque, ¡oiga usted!, en cuanto sale a debate un asunto de economía y tienen la oportunidad de opinar, hay personas que con una audacia rayana en la locura, se lanzan a dar opiniones no sustentadas, a decir barbaridades y se quedan tan tranquilos.
Y las opiniones de quienes opinan a la ligera sobre asuntos trascendentales, tienen el grave resultado de desorientar.
Lo malo es que entre las personas que abren la boca cuando deberían estar calladas, están hombres de empresa, economistas ( titulados ), funcionarios, periodistas, banqueros (medio quebrados, pero banqueros ) y por supuesto, gentes que opinan por su "puesto".
Ricardo Medina encabezó un articulo así : "Soberanía o estupidez monetaria". Sin comentario.
Mi amigo Fernando Mota, que debería saber mejor, escribe un articulo en donde habla, sorprendentemente, de una solución pragmática al problema monetario; relaciona, hasta cierto punto acertadamente, la miseria con la crisis endémica de nuestra moneda y la deuda publica y dice que el problema se trata de soberanía mal entendida.
Sabes, Fernando, no se trata solo de bienestar sino de esperanza. Una moneda común latino americana, basada en la plata, sería una moneda con valor anclado, fuerte frente a los ataques especulativos, que tendría como efecto inmediato, reducción de las tasas de interés, con lo cual se daría la vuelta a la economía de la región. Significaría, LIBERTAD.
Finalmente, a quienes hablan (hablamos) de la soberanía que se pierde con la dolarizacion, nos llama "Soberanologos"; es una palabra, que si pretendía ser ofensiva, enaltece. Si pretendía ser despectiva, dignifica. Si pretendía señalar negativamente a quienes aún amamos a este país, lo que hace es separarnos de quienes prefieren vivir agachados que morir de pie.
Panamá ha vivido casi cien años como colonia de los Estados Unidos. Y lo mismo Puerto Rico y por muchos años, Filipinas y como virtuales territorios de conquista, algunos otros países que no nombro para evitar reclamaciones de sus embajadores.
Y ni Panamá, ni Filipinas, ni Puerto Rico ni ninguno de los países que vivieron bajo un régimen dolarizado, han desterrado la miseria ni han resuelto sus problemas económicos. Ni han tenido un trato justo en lo político o en lo social. ¿Que razón, que a mi no se me alcanza, hay para esperar un trato diferente al trato de inferiores que han recibido quienes han vivido en esas condiciones por muchos años?.
¿Hay un "New Deal" que desconozco? ¿Hay una repentina iluminación, súbita conciencia y arrepentimiento? ¡ Ya se...hay un pacto secreto firmado por los E.U. , comprometiéndose a tratar como iguales a todos aquellos que se les sometan! Solo que lo han mantenido oculto por modestia.
Como al niño que se pone la capa de Superman y hay que vigilar para que no trate de volar desde la azotea y tenemos que advertirle que no va a volar por usar la capa, hay que vigilar a quienes se imaginan que bastará para resolver los problemas de este país con hacer circular una moneda extranjera, que entre paréntesis, tiene tan poco respaldo real como el peso; hay una declaración que si no fuera patética movería a risa. " No conozco ningún obrero que se quejara de que le pagaran en dólares". Sabe usted, Sr. Alberto Fernández Garza (Coparmex ), el problema con el obrero no es la divisa con que le paguen, es cuanto le pagan...
El Presidente de la asociación de banqueros, Don Carlos Gómez, se declara en favor de la dolarización.
Así, en frío, sin más, se lanza desde la azotea con su capita roja. ¿Son consignas, es ignorancia?.
Para terminar, les contaré algo que no tiene nada de cómico; un querido amigo, brillante hombre de negocios, simpático, profesional notable, tenía, probablemente por su misma inteligencia, desordenes de conducta que a veces culminaban en actos de violencia o de locura transitoria. Después de una crisis, fué llevado con un médico notable en esa época, quien dictamino que la solución era ¡ Practicarle la lobotomia frontal ! Por desgracia, opinaron muchas personas, ninguna de ellas realmente calificada, entre ellas los socios de mi amigo y el médico se salió con la suya. Se le practico la lobotomía, después del terrible trámite del juicio de interdicción y de rogar el pobre hombre que no se lo hicieran.
Cuando lo volví a ver, perdida la chispa de su genio, un apacible y sonriente niño medio idiota, sentí un profundo dolor. Ya no tiene remedio, no hay manera de saber si otra terapia hubiera tenido éxito, aunque un amigo mutuo, siquiatra, me dijo que probablemente hubiera sido posible curarlo.
Dolorosamente, hay quienes proponen practicarle la lobotomía a México, para dejarlo convertido en un triste idiota vestido